¿Por qué la mesa de noticias no es suficiente para los medios?

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Storybakers:

Hace falta una mesa de conversaciones dentro de las redacciones.

Una mesa enfocada en comprender las tendencias y los ángulos con que los medios han de cubrir las historias que se están desarrollando.

Los medios destinan demasiado tiempo a las noticias como hechos informativos.

En tiempos en que la noticia se comoditiza, ellos aún se obsesionan por una carrera que no les da notoriedad, no crea propiedad intelectual y no protagoniza conversaciones.

El periodista continúa sumergido en lo que piensa que debe cubrir.

Sostiene ese discurso en el que lo que ha de importar es aquello que el periodismo considera relevante aunque la sociedad pase de largo.

Es cada vez más evidente la desconexión entre lo que trasciende y lo que se informa.

Los medios que mejor se adaptan a esta nueva realidad son los que sobresalen.

Ahí está Infobae con su notable capacidad para contar la historia de fondo detrás de cada una de las tendencias que emergen.

Infobae no se concentra en la nota informativa.

Más bien construye a partir de ella para que sea ahí donde los usuarios encuentran el ángulo que están buscando.

Pero esas historias satélite sólo se construyen con éxito cuando se genera desde la redacción misma una cultura de seguimiento hacia lo que está pasando.

Pero no con foco en el qué, sino en las conversaciones detrás del qué.

Y en cómo esas conversaciones derivan en oportunidades de crear contenido diferenciado que lo mismo puede trascender en texto que en audio o video.

Por citar un ejemplo, en México todos los medios se obsesionaron con las primeras reacciones de la familia de Silvia Pinal tras el fallecimiento de ésta.

Fue tal ese deseo de tener las primeras palabras de sus familiares que aquello derivó en un acoso que dejó mal parado al periodismo.

No faltaron en redes sociales publicaciones argumentando que los reporteros se excedían, que ya era momento de ponerle un alto a la persecución de la que se llega a ser objeto incluso cuando se ha perdido a un ser querido.

Unos cuantos, mientras tanto, encontraron el ángulo que les permitió diferenciarse.

Hubo quienes se enfocaron en la historia detrás del cuadro de Diego Rivera protagonizado por Silvia Pinal.

Hubo, por ejemplo, un periodista de cotilleo político que ganó notoriedad gracias a un episodio que formaba parte de Las Dinastías del Poder en Podimo.

En dicho episodio, Beto Tavira profundizaba en la relación de Silvia Pinal con figuras políticas de México.

En ambos casos, el valor no se produjo a partir del hecho informativo en sí, sino de la oportunidad que dicho hecho habilitaba para contar esas historias relacionadas.

El qué como prioridad presenta mínimo margen de maniobra.

La oportunidad de ganar se esfuma en segundos dado que es fácilmente replicable.

Pero las conversaciones en redes sociales llegan a durar horas o incluso días.

Frente a la polémica por las declaraciones de Eugenio Derbez cuestionando la calidad de la actuación de Selena Gómez en Emilia Pérez, los medios no fueron protagonistas.

Y sin embargo había una gran oportunidad de serlo.

No relatando lo que había ocurrido.

Pero sí enfocándose en analizar si Eugenio Derbez tenía razón.

Explorando, por ejemplo, si de verdad lo de Emilia Pérez podría considerarse como apropiación cultural.

O creando un video que apoyara o no la postura de Eugenio Derbez y Gaby Meza al respecto.

Las opiniones, por más que no se quiera, forman parte fundamental de los medios en la actualidad.

No tendrían que existir sólo a través de columnistas con los que no cuentan en modalidad 24/7.

Tendrían que existir dentro de la propia redacción para reaccionar de forma oportuna e informada a aquello de lo que la audiencia está hablando.

Las redacciones sin opinión o especialización quedarán en desuso.

Es ahí donde radica la gran oportunidad de los medios para mantenerse vigentes.

Para conseguirlo tendrán que impulsar que la nota informativa no acapare su capacidad de producción.

Cada día que los medios pasan ensimismados en la noticia es un día más que los creadores los devoran en la conversación.

Conversaciones que ocurren tanto en lo hard como en lo soft.

Conversaciones que de no ser protagonizadas por medios, seguirán siendo protagonizadas por usuarios y hasta por la clase política.

Para los medios quedarse en la mera consignación es un suicidio.

Puede gustar o no la conclusión pero no por ello deja de ser realidad.

Sugiero entonces que los medios se tomen tan en serio la mesa de conversaciones o tendencias como la mesa de noticias.

E incluso más.

Porque una tendencia es una oportunidad desde el qué dado que al menos los medios tradicionales tardan en cubrirla.

La noticia, en cambio, sólo presenta verdaderas oportunidades de negocio cuando se atiende y se profundiza en los ángulos relacionados.

La inmediatez le ha hecho demasiado daño al periodismo.

Toca que corrijan la plana aprendiendo a crear en otros tiempos.

Mucho más parecidos a los de las revistas que a los de la urgencia digital.