El éxito viral de 35 millones de views de KFC: los creadores fueron la clave
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Storybakers:
KFC lo ha conseguido.
Ha hecho que nos devoremos una colección de anuncios.
Que lo hagamos, además, de forma voraz.
Porque supo encontrar cómo llevar a los creadores a su terreno.
Porque construyó la que podríamos considerar la primera serie original de cortometrajes en TikTok.
Y porque incluyó en esa misma construcción una especie de detrás de cámaras que lo hizo aún más rico en experiencia para la audiencia y en resultado narrativo.
El eje central ha sido Javier Ibarreche.
Ese tiktoker con pasado como profesor de español que terminó convertido en el gran referente en la cobertura de los Premios Óscar entre los medios mexicanos.
Ibarreche, por mucho el creador más exitoso en lo que refiere a reseñas y análisis de series y películas en el ecosistema latinoamericano, lanzó un primer video que provocó extrañeza.
Parecía perder la cabeza.
Estar hablando sin sentido.
Aunque, claro ya desde entonces KFC estaba ahí.
El video alcanzó 3.8 millones de visualizaciones entre sus más de 11.7 millones de seguidores en TikTok.
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Dos días más tarde, el 11 de noviembre, la cuenta de KFC México publicó el primer video de “Morder para Creer”.
Una serie original de KFC dirigida por Ibarreche.
Ahí se revela que el propio Ibarreche se ha ensoberbecido como director de 5 cortometrajes sobre el pollo frito.
Slobotzky, uno de los dos conductores de La Cotorrisa, se convierte en su primer protagonista.
Slobotzky no la pasa bien.
Habla de que él es comediante, no un actor de dramas.
Pero Ibarreche se encarga de que llegue hasta las lágrimas.
Los tres videos, los dos de preparación y el episodio final, arrojaron más de 14.7 millones de views.
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El episodio final fortalece un mensaje que se viene sembrando desde la previa: el pollo de KFC es natural.
No es un pollo congelado.
Y es precisamente ese episodio el que más views registra con 5.7 millones de visualizaciones.
La dinámica se repite para los cortometrajes restantes.
Ahí cobra aún más relevancia, “Tomás, El Pollo”.
Un asistente no solicitado por Ibarreche que le explica el supuesto gran secreto de KFC: pollo marinado por 12 horas.
En esta segunda entrega se abraza el estilo documental/reality para mostrar el trabajo creativo de Ibarreche.
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Durante el armado del segundo cortometraje, Ibarreche le explica a Lalo Villar, creador de contenido gastronómico, que participará en su propia versión del proyecto de La Bruja de Blair.
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Con Lalo Villar buscando desesperado el secreto detrás del sabor de pollo frito de KFC.
Aunque en un comienzo Villar se lo toma a broma, se ve sumergido de pronto en una oscuridad que termina sorprendiendo incluso al propio Ibarreche y al Pollo.
Ibarreche presenta así Lo Inexplicable genera Terror.
Un cortometraje en que una fuerza maligna pretende apoderarse del secreto mejor guardado del pollo frito.
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Este segundo paquete de videos suma 6.2 millones de visualizaciones.
A diferencia del primero, no es el episodio estelar sino el segundo el que más views alcanza con 3.9 millones.
El tercer cortometraje es protagonizado por Zahie Tellez.
En dichas entregas, comienzan a exponerse los abusos de Ibarreche como director.
Tomás, su asistente, considera que es incluso más complicado que Alfredo Adame, uno de los personajes más cancelados de México.
Como en las anteriores entregas, KFC enfatiza el mensaje del “puré de pura papa” mientras Ibarreche dirige una historia de amor.
Zahie, chef de profesión, se niega en un inicio.
Pero al ver a su protagonista, Zahie se lo piensa mejor.
Es este episodio el que más views genera en torno al tercer cortometraje.
Más de 4.8 millones de reproducciones.
Ibarreche presenta así Amor Puré: dejarte sentir hace todo más real.
En total, los videos del tercer cortometraje generan más de 6.7 millones de views.
Para el cuarto cortometraje, Ibarreche se enfrenta a las diferencias de edad.
Choca con la idea de que Omahi es más joven que él.
Defiende entonces la idea de que él es atemporal.
Y pide a todos en el set que le llamen “Bro” en vez de señor.
Presenta entonces su cortometraje de ciencia ficción.
Omahi es el protagonista.
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El paquete de videos del cuarto cortometraje derivó en más de 7.7 millones de reproducciones.
El quinto y último, publicado hace 6 días, coloca al propio Ibarreche como el protagonista de su propio cortometraje.
Ha perdido la cabeza.
Ha comenzado a imaginar cosas.
Y a partir de ahí deriva Muerdo, luego existo.
El cine de arte desde la visión de Ibarreche.
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Los tres episodios finales han generado hasta el momento 2.7 millones de views.
En su conjunto, los videos emanados de Morder para Creer alcanzan más de 35.2 millones de reproducciones.
Un éxito viral que permite entender que existen las fórmulas ganadoras para provocar que la audiencia se coma un anuncio.
Que lo devore como si tuviera pollo enfrente encima.
La fórmula partió de generar expectativa con el sinsentido de Ibarreche.
Llegó enseguida esa develación de Ibarreche en modo director.
A partir de entonces, se introduce lo más relevante de los mensajes para KFC.
La desmitificación de todo aquello que se le critica.
Acabar con la idea de que el pollo de Kentucky no es natural.
Defender la idea de que su puré es hecho con papás 100% naturales.
Mostrar, a final de cuentas, que su producto es de calidad.
O cuando menos, mucho menos dañino que lo que suele decirse.
El éxito ha sido redondo.
Ibarreche es más que un creador de contenido.
Es un creador con preparación artística.
Con capacidades para generar drama.
Para exacerbar las emociones.
Y KFC fue su gran vehículo para verlo en una faceta que le permite desbloquear un nuevo nivel.
Hay ocasiones en que todos los involucrados ganan.
Ésta es una de ellas.
La audiencia que ha pasado un buen momento.
Ibarreche porque ha encontrado cómo generar ingresos entregando una experiencia de calidad.
KFC porque ha sabido enviar sus mensajes clave.
Y la propia Creator Economy que valida que es posible ver publicidad más allá de lo trillado.
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