Caliente TV: la casa de apuestas que hizo historia en la Champions League
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El gran patrocinador de los medios deportivos en México es también su nuevo gran competidor.
Caliente TV ya no es sólo una señal con intenciones de generar algo de awareness entre las nuevas generaciones en torno al mundo de las apuestas, es una televisora en toda forma.
Una que transmite los partidos de los miércoles en la Champions League.
Una que reúne a un talento que para algunos es superior al que conformó Max para la transmisión del torneo.
Destaca, sobre todo, la presencia de Adriana Monsalve.
Una periodista y presentadora que desde el anuncio de su llegada se ha convertido en la gran referente de Caliente TV como una nueva señal premium para seguir el deporte.
Se complementa el golpe con la presencia de Diego Balado y Andrés Agulla.
Caliente TV, además, se permite jugar con su naturaleza digital para crear formatos híbridos que aún requieren de trabajo, pero que cuando menos se salen de la típica transmisión televisiva que nos han regalado históricamente quienes tienen los derechos de transmisión.
La primera gran muestra se ha producido con el formato bajo el que decidieron cubrir el sorteo de la Champions League.
Se trató de una emisión híbrida en la que lo mismo jugaban con lo que ocurría en las oficinas de Caliente TV que presentaban el típico set televisivo que suele dar cuenta de este tipo de eventos.
Durante la transmisión en vivo a través de YouTube, fue posible apreciar a especialistas deportivos reconocidos, a creadores digitales y a referentes del entretenimiento en la industria televisiva mexicana.
Caliente TV ya transmite en exclusiva los partidos de los Xolos y Gallos de la Liga MX.
Transmitirá también la Ligue 1 de Francia por los próximos tres años.
Sus números son aún bajos.
Registra 245 mil suscriptores.
Demasiado poco para una señal con tantas personalidades y con semejantes derechos de transmisión.
En televisión su presencia es también demasiado acotada.
Puede verse a través de MVSHub en el canal 508 y Total Play en el canal 518.
Pero es cuestión de tiempo, particularmente con los miércoles de Champions League, para que esos números luzcan distintos.
Para el resto de los medios el crecimiento de Caliente TV representa sin duda una potencial amenaza.
Si bien Caliente como casa de apuestas y Caliente TV se han esmerado en mantener operaciones independientes, el crecimiento y consolidación de Caliente TV sí que podría llevar a una potencial desinversión de Caliente en distintos medios de comunicación.
Hace tiempo ya que en México y en el mundo existe una enfermiza dependencia de los medios hacia los patrocinios de casas de apuestas.
En México esa realidad es aún más evidente con Caliente.
Guardando toda proporción, Caliente TV para efectos de los medios deportivos mexicanos es el equivalente a Apple TV o a Amazon Prime Video para la guerra global del streaming.
Caliente TV ha podido realizar inversiones multimillonarias ante el hecho de que su verdadero negocio no pasa por la creación de su medio de comunicación.
Lo mismo que ocurre con Apple TV y Amazon Prime Video con sus capacidades económicas que ponen en jaque a señales tradicionales como ESPN o TNT Sports.
Caliente TV difícilmente hará sentido si se le analiza estrictamente como negocio.
Lo mismo que pasa con Apple TV y Amazon Prime Video.
Pero desde el inicio han tenido claro que su idea es acceder a generaciones de múltiples edades, especialmente aquellas que no pueden ser alcanzadas por la publicidad tradicional ante las regulaciones en torno a casas de apuestas, para ir generando una relación de marca que fortalezca el negocio principal de Caliente.
Caliente TV, además, podría no sólo cuestionarse dos veces si vale la pena seguir invirtiendo tanto en medios de comunicación y creadores, sino también competir por los presupuestos publicitarios que se van a los medios de comunicación.
Hoy, por ejemplo, sería potencialmente más atractivo invertir en publicidad con Caliente TV para la Champions League y para los shows que tienen con creadores destacados que invertir en las transmisiones de Max para México.
Ni qué decir de los padecimientos de los medios deportivos que carecen de derechos de transmisión.
Bajo el esquema actual, los medios tradicionales, digitales o no, se convertirán en el eslabón más débil entre los generadores de contenido deportivo.
La amenaza no pasa sólo por marcas como Caliente o por plataformas como Apple y Amazon.
También por los propios deportistas.
Como muestra los 53.2 millones de suscriptores que ha alcanzado Cristiano Ronaldo tras 13 días de haber lanzado su canal de YouTube.
E incluso por los creadores.
Porque ahí donde los creadores atrapan el tiempo de la gente tanto en formato corto como en largo, a los medios o les queda el consumo de notas que nop generan más que unos cuantos minutos de estancia o la realización de streams que padecen enormidades para generar números significativos.
A cinco meses de haber lanzado su apuesta de streaming en vivo, Récord Plus padece para conseguir transmisiones por arriba de los mil views en YouTube.
La gran mayoría se encuentran por debajo de esa cifra pese a haber establecido una parrilla de programación con periodistas deportivos y entertainers reconocidos.
Se entiende, como lo he escrito, que para ellos el en vivo es una especie de formato pilar que sirve para después crear las notas escritas más leídas del sitio, pero la viabilidad de sostener dicha apuesta a nivel negocio resulta demasiado compleja.
No sólo para Récord, para los medios en general.
Tanto por sus dimensiones como empresas como por la necesidad de pagar por un talento que estará siempre tentado a irse por cuenta propia.
En esa realidad de números que no encajan para el negocio corporativo de los medios, los creadores, las marcas, las tecnológicas y los propios deportistas están por arriba en la pirámide jerárquica de la industria de los contenidos deportivos.
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